Como parte de los proyectos con marcado compromiso ambiental que llevamos adelante en El Parque Papas, se encuentra nuestra planta de tratamiento de efluentes que permite reutilizar hasta un 90% del agua de desecho para el proceso productivo. De esta forma, optimizamos al máximo el uso de este tan valioso recurso.
Cómo funciona
Las papas, antes de ser entregadas a la industria y al mercado fresco, deben lavarse a fondo para eliminar arena, tierra y cualquier otra suciedad presente. Los efluentes generados durante el lavado contienen alto contenido de sólidos suspendidos, principalmente tierra. Para evitar un impacto negativo en el medio ambiente es necesario un tratamiento adecuado de estos efluentes.
Previo al lavado, la papa sufre un proceso de desbastado grueso y fino donde se extrae la tierra adherida de los tubérculos. Este excedente es reutilizado para rellenar los campos de producción. Luego, pasa por la primera instancia de lavado donde se utiliza el 100% del agua reciclada, en una segunda instancia, se enjuagan con agua pura, para pasar finalmente al pulido y secado de la misma.
Toda el agua utilizada en este proceso, ingresa a dos sedimentadores longitudinales dispuestos en serie donde permanece dos días. Este diseño en canales del sistema de sedimentación es una mejora con respecto a los sedimentadores circulares tradicionales, ya que posee una mayor estabilidad hidráulica y favorece la extracción de barros. En el primer sedimentador se remueve la mayor cantidad de los contaminantes (80 %) mientras que el segundo brinda un pulido final que asegura la calidad del agua a reutilizar. Dichos barros, extraídos una vez que los sedimentadores están en su capacidad máxima, son tratados en dos playones de secado, para luego ser reutilizado en los campos de producción.
Dándole al agua una “segunda oportunidad”
A continuación, luego de cumplido el período de sedimentación en el segundo canal, el agua tratada se vuelca en una cámara de bombeo que permite enviar nuevamente a planta para ser reutilizada en la primera etapa de lavado. De esta manera, implementamos un reúso de agua interno que reduce significativamente el consumo de agua potable, minimizando el impacto en el acuífero local.
Esta estrategia de tratamiento y reutilización de los efluentes generados durante el lavado de las papas se suma a otras iniciativas amigables con el ambiente como la utilización de fertilizantes verdes, la incorporación de paisajes multifuncionales y el proyecto de riego por goteo.